La diosa Sulis. Bienestar, malestar.

Con esta imagen que Ana mandó el otro día, redundando en la abundancia, comienzo este finde. Ayer fue un dia luminoso, más también comencé a sentir ya esa luna de sangre que se acerca. Esa luna llena en fuego a la vez que esas tensiones que hay sobre todo en el área de las relaciones y con muchos síntomas de enfermedad en las personas alrededor, brotes de psoriasis súbitos, verrugas que aparecen, bronquitis y malestar de los cambios de tiempo...
Esta mañana en el desayuno quería sacar una diosa de la baraja de Amy Sophia Marashinsky, y han salido dos. Hestia y Sulis. Sulis -bienestar, malestar- dice:


Todo es uno;

Estar mal, estar bien.

Todo es energía,

energía en constante movimiento,

energía en constante flujo,

incansable energía que nunca está quieta,

despiadada energía que es como una apisonadora,

ilimitada energía que alberga posibilidades,

chispeante energía que cosquillea y canta,

energía almacenada que aguarda ser liberada.

Las aguas curativas de mi santuario

regeneraron

revitalizaron,

trajeron claridad,

sanaron heridas,

abrieron la visión,

dejaron fluir.

Con el flujo de la energía,

la danza de la vida se reanuda,

malestar y bienestar,

todo uno,

todo energía, todo flujo.

Y seguimos. Los antiguos habitantes de las Islas británicas fueron a visitar a Sulis a su santuario-balneario de Bath en busca de la salud y de la curación. Se decía que sus aguas eran milagrosas. Sul es sol y Ojo  en celta y se cree que se la tenía por una Diosa solar. Se la representa ascendiendo a través de sus aguas curativas hacia la luz del sol. Sulis representa las profundidades que todos los seres humanos debemos alcanzar en nuestro viaje hacia la luz, la salud y la totalidad. Ana Sophia interpreta esta carta como que Sulis nos dice que es el tiempo de abrazarse a la danza del malestar/bienestar. Tómate tiempo y alimenta la energía de la que dispones. Es el momento de dejarlo todo a un lado y de ponerte a tí misma como máxima prioridad. Es el momento de pedir lo que necesitas y de dejarlo entrar en tí. date permiso para buscar apoyo y ayuda en tu proceso de curación. El camino hacia la totalidad se haya en tu caso enn reconocer tus propias necesidades y en darles prioridad, alimentando tu energía y consintiéndote nuevas maneras de estar contigo misma que sustenten tu salud y tu vitalidad. Sulis dice que la forma en la que administras tu energía puede marcar la diferencia entre el malestar y el bienestar. El malestar indica el momento en el que conviene dirigir el flujo de energía hacia dentro; el bienestar indica el momento en que conviene orientar el flujo de energía hacia fuera.

El Consejo internacional de las 13 Abuelas indígenas

Hace unos años estuve en el encuentro de Borja de sanación de lo femenino organizado por la Arboleda de Gaia. Estaban doce de las trece abuelas, y la embajadora... muchas veces recuerdo pequeñas anécdotas que me hacen sentirlas presentes, recordando voces, risas, algarabías... Hoy ha venido Natalia a conocer La Loba y a conocerme, y paseando por la orilla del río con los chopos y álamos con ese color amarillo que comienza, han salido a la conversación. Hace tiempo que quería escribir algo de Margaret Behan, que ya vendrá... pero me encanta tener a la brujilla buscadora, a la mariposa mediadora de mujeres formadoras, leyendo e interiorizando ese libro. Hemos visto una serpiente de agua en nuestro paseo, y con los pies en el agua ha venido la abuela libélula a saludarnos. Incluyo la foto de la abuela Agnes Baker Pilgrim, de Oregón, del clan del salmón.
Recojo aquí la declaración fundacional del Consejo de las 13 abuelas.

“Somos 13 abuelas indígenas. Venimos de las cuatro direcciones de la tierra para encontrarnos en este territorio de los pueblos de la Confederación Iroquí.

"Venimos aquí desde la selva amazónica, del Círculo Polar Ártico, de los grandes bosques del noroeste de América, de las grandes llanuras de América del Norte, de las tierras altas de Centroamérica, de las Blaks Hills de Dakota del Sur, de las montañas de Oaxaca, del desierto del sudoeste americano, de las montañas del Tibet, de Nepal y de la selva tropical del África Central.

“Afirmando nuestra relaciones con las gentes de la medicina tradicional y con las comunidades de todo el mundo, hemos sido reunidas por la visión común de formar una nueva alianza global.

“somos el "Consejo Internacional de las Trece Abuelas Indígenas". Nos hemos unido como una sola mujer en una alianza de oración, educación y sanación para la Madre Tierra. Trabajamos por todos sus habitantes y por todos los niños de las siete generaciones venideras.

“Estamos profundamente horrorizadas por la destrucción sin precedente de nuestra Madre Tierra, por la contaminación del aire, el agua y el suelo; por las atrocidades de la guerra, el azote global de la pobreza, la amenaza de las armas y residuos nucleares, el derroche de la prevaleciente cultura materialista, las epidemias que amenazan la salud de los seres de la Tierra, la explotación de las medicinas indígenas, y la destrucción de nuestros modos de vida indígena.

"Creemos que nuestras maneras pacíficas de gestión y modos ancestrales de oración y sanación son vitalmente necesarios hoy. Nos hemos unido para nutrir, educar y enseñar a nuestros niños. Venimos a defender la práctica de nuestras ceremonias y afirmar públicamente nuestro derecho a usar nuestras plantas medicinales libres de restricción legal. Nos hemos unido para proteger las tierras donde nuestras gentes viven y de la que dependen nuestras culturas y para salvaguardar la herencia colectiva de las medicinas tradicionales. En resumen, para defender la Tierra misma. Creemos que las enseñanzas de nuestros ancestros iluminarán nuestro camino por este futuro incierto.
“Nos unimos con todos aquellos que honran al Espíritu, con todos aquellos que trabajan y rezan por nuestros niños, por la paz del mundo y por la sanación de la nuestra Madre Tierra.
“Por todas nuestras relaciones."

Miembros del Consejo Internacional de las Trece Abuelas Indígenas:

Agnes Baker Pilgrim - Takelma Siletz - Oregon, América del Norte
Aama Bombo - Tamang - Nepal, Asia
Rita Pitka Blumenstein - Yup'ik - Círculo Polar Ártico
Julieta Casimiro - Mazateca - Huautla de Jimenez, México - América Central
Maria Alice Campos Freire - Amazonia Brasileña, América del Sur
Bernadette Rebienot - Omyene - Gabón, África
Tsering Dolma Gyaltong - Tíbet, Asia
Flordemayo
- Maya - New México, América Central
Margaret Behan - Arapahoe Cheyenne - Montana, América del Norte
Beatrice Long Visitor Holy Dance - Oglala Lakota - Black Hills, Dakota del Sur, Norteamérica
Rita Long Visitor Holy Dance - Oglala Lakota - Black Hills, Dakota del Sur, América del Norte
Mona Polacca - Hopi Havasupai Tewa - Arizona, América del Norte
Clara Shinobu Iura - Amazonia Brasileña, América del Sur
www.grandmotherscouncil.org

Rito de sanación de la ruptura madre/hija



               RITO: SANACIÓN DE LA RUPTURA MADRE/HIJA
Maureen Murdock nos propone este rito para el restablecimiento de la relación que existe entre tu madre y tú. Puedes celebrar este rito sola o con un grupo de mujeres que también estén comprometidas en la sanación de su ruptura madre/hija. Si no tienes un grupo de mujeres, pide el apoyo y la presencia de una amiga íntima. Cuando te decidas a celebrar este ritual, no sólo manifiestas la intención de restablecer tu relación con tu madre sino que también te autoinvitas a alinearte con lo que se necesita para sanar la ruptura presente en el interior de tu naturaleza femenina.
         Pon un bonito altar de flores, una vela y una imagen o una figura de la Diosa para honrar tu relación con tu madre. Busca una fotografía de tu madre o cualquier objeto que ella te haya dado y que colocarás más tarde, durante el desarrollo del ritual, en el altar. Al empezar el ritual, invoca la guía y la sabiduría de la Madre Diosa.
         Tanto si alguna vez te has sentido querida, aceptada, protegida, alimentada y bien recibida por tu madre, como si te has sentido rechazada, abandonada y criticada, tanto si tu madre ha estado presente como ausente, si ha podido tocarte o no, vas a realizar este ritual para buscar, al menos parcialmente, quien es o quien fue en tu vida. De algún modo, tu madre lo hizo lo mejor que pudo teniendo en cuenta su propio ambiente familiar, el momento histórico que le tocó vivir, su sentido maternal o su carencia del mismo, su salud, situación económica, estado civil; lo que le estaba socialmente permitido como mujer, y el apoyo que recibió para ser una buena madre, tanto de su esposo como de la cultura a la que perteneció.
Rinde honor a su fuerza, su sabiduría y su capacidad de entendimiento, y agradécele el haber elegido que nacieras. (Puede que en este momento no te sientas con fuerzas para hacerlo, pero de lo que se trata en este momento es de abrir el corazón para que puedas creer que tu madre hizo las cosas lo mejor que supo). Al realizar este rito vas a curar las heridas de tu madre a la vez que las tuyas, de forma que ya no te vuelva a acompañar la idea de tu madre unida a una sensación de dolor, cosa que a partir de ahora puedas empezar a sentir ante esa idea la luz de tu madre.
Piensa qué es lo que necesitas conseguir a través de este rito para mejorar tu relación con tu madre. Por ejemplo, si necesitas comprenderla, perdonarla, sentirte responsable de ella, aceptarla, sacar algún aspecto de ella que ella haya mantenido oculto, llorar su pérdida, dejarla ir, pedirle a ella que te deje marchar…
Coloca el objeto o la fotografía en el altar y ve enunciando en voz alta la línea femenina de tu genealogía. Por ejemplo, yo tendría que decir: <>
Si otras mujeres forman parte en este rito haz una breve semblanza de tu madre. Después, dirígete directamente a tu madre y cuéntale qué es lo que aprecias de ella, o qué es lo que sigues necesitando de ella. Cuando hayas terminado, enciéndele una vela, bendícela y deja que se vaya.

Los siguientes ejemplos proceden de un ritual celebrado en grupo que formó parte de un taller del Viaje Heroico en la costa noroeste del Pacífico.
         Ellen llamó a media noche a su madre dos días antes de que iniciáramos nuestro taller para pedirle prestado su medallón. Lo puso en el altar diciéndonos con una sonrisa que esa era la pieza que más le gustaba del joyero de su madre porque contenía un secreto. Dentro del medallón estaba una foto de su padre, y debajo de esa foto estaba la de otro hombre llamado “Mike, el vaquero” que había tenido algún tipo de relación con su madre antes que su padre. Ellen dijo que el medallón representaba una chispa que su made tenía escondida en su interior. Ellen quería pedirle que esa chispa fuese para ella. Cuando habló con su madre en el rito le pidió ¡una chispa de ánimo para sí.
         Francine colocó en el altar la fotografía de una mujer peinada en el estilo de los años cuarenta y nos dijo: Mi madre era una fumadora empedernida y adicta a los barbitúricos. Murió por no saber cuidar de sí misma. Enseñó a sus hij@s a cuidar de sí mism@s, pero no supo hacer lo mismo con respecto a ella. Murió de un enfisema y de un problema de hígado. Durante la segunda guerra mundial había sido una mujer fuerte, enfermera del ejército. Me tuvo estando completamente sola y me cortó el cordón umbilical con las tijeras de costura. Había llamado al hospital para que fueran a por ella, pero no se creyeron que fuera a dar a luz tan rápido. Después de que yo naciera, volvió a llamar al hospital, sostuvo el teléfono para que oyesen el llanto del bebé que era yo, y les dijo: “Y ahora, ¿me creen o no? Entonces enviaron una ambulancia.” Y dijo a continuación: -Quiero rendir mi homenaje a mi madre por la fuerza que tuvo, pero me hubiera gustado que hubiera tenido ayuda para resolver sus problemas. Siempre la consideré responsable de su adicción. Cuando murió, yo era demasiado pequeña y echaba de menos tenerla como madre. -

Noveno día: Somos amor, somos vida.

 Ayer llegué a casa de Soraya después de dar las clases y ella aún no había llegado de su paseo por la montaña. Hice la comida, que más tarde complementamos haciendo más juntas. El dia antes en Ruzafa, ayer en la Tosca, haciendo hogar, cuidándonos... Por las mañanas hay unas nieblas increíbles ahora en el valle, mucha humedad y ese vértigo de la luz. Alrededor están con el síndrome de otoño... yo no sé, con ganas de nutrirme y con la pregunta todo el rato, ¿qué me nutre a mí?
 
Tengo ganas de mar: La semana que viene, con días festivos variados, habrá movimiento. Como no me he movido en verano y he estado todo agosto en La Loba, si siento hacer lo que la mayoría de personas han hecho en agosto o septiembre, esa semana de mar, ese dejarse fluir mirando las olas.
Hoy buceo en el libro Los cinco niveles del apego, de Miguel Ruiz Jr. y recojo el siguiente fragmento. - Desde el punto de vista tolteca este es el espejo claro, vemos cada situación tal y como es, sin oscurecerla con una nube de humo. Sabemos que el conocimiento es el reflejo perfecto de la vida y nosotros somos vida. Sabemos que vivir la vida es un acto de amor,  y cómo elegimos el camino que queremos tomar y cómo queremos vivir, constituye un acto de amor incondicional hacia nosotr@s mism@s.
Al abordar la vida como una obra de arte basándonos en el amor que sentimos hacia nosotr@s mismos, somos capaces de amar incondicionalmente a las personas que forman parte de nuestra vida tal y como son, sin necesidad de domesticarlas para que vean el mundo desde nuestro punto de vista. A este nivel del apego siempre está presente el respeto a la manifestación de los sueños personales de nuestros seres queridos, tanto si estamos de acuerdo como si no con sus decisiones. Al querernos a nosotr@s mismos, somos capaces de querer a los demás. Después de todo, no podemos dar o compartir lo que no tenemos.
Cada pensamiento y cada idea de nuestro sistema de creencias tienen poder sólo por los acuerdos a los que hemos llegado en forma de síes o noes, y constituye nuestra preferencia de cómo queremos involucrarnos en el sueño del planeta y en la vida.
 Al mirar estas fotos, vemos que desde el interior hay calma y hay centro. Es como un LP, ¿se mueve el ojo del huracán? ¿da vueltas el centro? Sin embargo, desde afuera, todo es movimiento. Mis queridas cuevas marinas se ven "azotadas" por grandes olas. Que estos nueve días de Demetear y Persefonear os hayan brindado alguna pista de algo, y seguid sonriendo a nuestras preguntas y nuestras búsquedas...

Octavo día: Démeter, y Perséfone en-lobadas.

De vez en cuando leo a Sylvie Bérubé y su chamana del día o su diosa del día. Démeter y Perséfone están abrazadas recién encontrando el sueño que les permitirá volver a la fusión por un momento, apoyándose mutuamente. Hoy cuando llevo días de nuevo masticando Mujeres que corren con lobos, y saltando de la mujer esqueleto, al tema de la creatividad, acabo de encontrar lo siguiente: la chamana de mañana 2 de Octubre es La Mujer que corre con lob@s.

LA FEMME QUI COURT AVEC LES LOUPS est une chamane qui aime et qui veille sur les loups. Cette Femme Sage connaît leur fidélité, leur sagesse. Cette Femme Guérisseuse sait comment les aborder et faire partie de leur clan. Cette Femme Médecine reconnaît le caractère sacré des loups et l’importance de les protéger. Elle a une relation intime avec eux. Elle porte souvent sur elle une dent de loup.  Elle utilise ses grands pouvoirs de femmes, ses pouvoirs féminins pour communiquer avec les loups.
La mujer que corre con lob@s es una mujer que ama y cuida a la manada lobuna. Sabe de su fidelidad, de su sabiduría. Esta mujer sanadora sabe como acercarse a ell@s y conoce la importancia de protegerl@s. Tiene una relación íntima con ell@s. Lleva a menudo encima de su cuerpo un diente de lob@. Utiliza sus grandes poderes para comunicarse con ell@s.


LA MISSION DE LA FEMME QUI COURT AVEC LES LOUPS :
- Être la Gardienne du clan des Loups-
L’humanité a besoin du savoir ancestral de cette Femme Chamane, Médecine, Guérisseuse afin qu’elle retrouve sa place sur la terre comme au ciel en déployant ses grands pouvoirs féminins et
en enseignant l’importance de protéger les loups.
RÉFLEXION :
  Je retrouve la louve en moi et j’ose exprimer la femme instinctive en moi. 
Encuentro a la Loba en mí misma y me atrevo a expresar a la mujer instintiva en mí.

 
Y prosigo con un trozo de Clarissa Pinkola Estés. -El amor cuesta caro. Cuesta el valor de la valentía. Cuesta tomarse una molestia. Amar significa permanecer al lado de alguien. Significa salir de un mundo de fantasía y entrar en un mundo en el que es posible el amor duradero, cara a cara, hueso a hueso, un amor hecho de afecto.
Amar significa quedarse cuando todas las células gritan “Echa a correr”.
Una parte de la cosecha y de la reflexión de estos días sobre Démeter y Perséfone me está llevando a recordar que el amor no tiene agenda personal, y que no saber no es señal de no seguir intentándolo. Quizá el Gran Amor? tiene que morir para que ese pequeño y constante amor de ser capaz de ver a las otras en su verdad prevalezca. La luz está en nosotras, somos enteras y somos perfectas. Pero lo olvidamos, y nos empeñamos en intentar rellenar siempre. Pararos, parémonos, y dejemos ser. Dejemos brillar, e intentemos ser felices, bailar con la alegría, agradecer. Paradójicamente la única forma de trascender nuestras limitaciones es amar a l@s demás en la imperfección. Dichas imperfecciones son nuestras diferentes maneras de ser ya perfectas.... Y así sucesivamente...

Séptimo dia. En torno al hogar-el corazón de lo real.

 En el mito de Démeter y de Perséfone hay vaguedades en torno al lugar. ¿Dónde seguirán encontrándose madre e hija? Está claro, que cuando Perséfone vuelve con Hades, es señora del inframundo. ¿Es solo importante el pacto de tiempos? Y nosotr@s, ¿dónde habitamos con nuestro estilo nuevo de vincularnos? ¿Creamos un hogar o podemos desplegar "sensaciones de hogar móviles" ? ¿Tiempos líquidos? ¿Amores líquidos? Raíces, corazones y alas.

¿Es el hogar un lugar de orden? El otro dia en una novela de Katherine Pancol, leía la frase escrita por ella de que el hogar es aquel lugar en el que puedo andar y ubicarme con los ojos cerrados... ¿Es nuestro centro de gravedad? ¿Es el centro del mapa mundi?

Siguiendo a Jeannette Winterson, hilvano estas relexiones sobre el hogar, al hilo de minitextos de ¿Por qué ser feliz cuando puedes ser normal?

(68) El filósofo rumano Mircea Eliade habla del hogar- el hogar ontológico y también el geográfico-, y en una frase encantadora llama al hogar -el corazón de lo real- El hogar nos dice es la intersección de dos líneas, la vertical y la horizontal. El plano vertical tiene cielo, o el mundo superior en un extremo, y el mundo de los muertos en el otro extremo. El plano horizontal es el tráfico de este mundo, moviéndose de un lado a otro, nuestro propio tráfico y el de los numerosos otros.
El hogar es un lugar de orden. Un lugar donde el orden de las cosas se une- los vivos y los muertos-, los espíritus de los ancestros y los habitantes presentes, y la reunión y el descanso de tanto trasiego.
Abandonar el hogar sólo puede suceder porque hay un hogar que abandonar. El acto de abandonarlo nunca es una mera separación geográfica o espacial; es una separación emocional, deseada o no. Firme o contradictoria.
Para el refugiado, para el sin techo, la ausencia de esta coordenada fundamental para ubicar el yo tiene unas consecuencias muy graves. En el mejor de los casos, se puede controlar, compensar en cierto modo; en el peor de los casos, una persona desubicada no sabe adónde ir, literalmente, porque no hay un norte real. La brújula no tiene aguja. El hogar es mucho más que un refugio; el hogar es nuestro centro de gravedad.
Un pueblo nómada aprende a llevarse sus hogares consigo, y los objetos familiares se despliegan o se reconstruyen de lugar en lugar. Cuando nos mudamos de casa, nos llevamos con nosotros el concepto invisible de hogar, que es un concepto muy poderoso. La salud mental y la estabilidad emocional no requieren que permanezcamos en la misma casa o en el mismo lugar, pero requieren una sólida estructura en el interior, y esa estructura se construye en parte con lo que sucede en el exterior. El interior y el exterior de nuestras vidas son el caparazón en el que aprendemos a vivir.

(71)
La puerta de nuestra casa puede ser una cosa maravillosa, o una visión aterradora; pero raras veces es sólo una puerta.
El cruzar hacia dentro y hacia fuera, los distintos mundos, los espacios significativos, son coordenadas privadas que en mi ficción he intentado convertir en paradigmáticas.
La historia cruza el umbral desde mi mundo al vuestro. Nos encontramos en los peldaños de la historia.
Los libros son para mí, un hogar. Los libros no hacen un hogar, son un hogar, en el sentido de que hacemos como con una puerta, abrimos un libro y entramos. En su interior hay un espacio diferente y un tiempo diferente.
También hay un calor: una chimenea. Me siento con un libro y tengo calor. Lo sé desde las gélidas noches en el peldaño de casa.

(174)
Pero como iba a descubrir tengo grandes problemas con el hogar, con construir hogares, con construir hogares con alguien.
A Deborah le encanta estar lejos del hogar y disfruta con ello. Es un cuco.
Yo adoro volver al hogar, y mi idea de felicidad es regresar a un hogar con alguien a quien amo…
El abandono repentino e inesperado, constelado como estaba alrededor de la idea del hogar/la imposibilidad del hogar, encendió un fusible que prendió y cuya llama fue ardiendo hacia una apertura tapiada muy en el fondo de mí.

Y retomo mi voz, tengo tendencia a crear hogares, y construyo hogares de clan. A veces rezuman energía cálida, y a veces como anoche experimentaba viendo la película La Gran Belleza de Paolo Sorrentino, pueden convertirse en bellos palacios vacíos si el corazón se ha tomado unas vacaciones y no late. ¿Qué creamos? ¿En qué eje espaciotemporal? ¿Para quiénes? ¿A qué precio?
Ayer en la baraja del Niño interior, me salió el As de Cristales.- Isha lerner y Mark Lerner dicen- En el folclore y las leyendas del norte, existe la creencia de que, durante los meses del invierno, cuando la tierra está silenciosa y dormida, bajo su manto de nieve, los gnomos están ocupados entretejiendo cristales de la luz de la Luna, el Sol y las estrellas. Cuando llega el renacimiento de la primavera, los gnomos ofrecen estas preciosas gemas al cielo, y a través de la suave lluvia de la primavera, se crean unos arcoiris magníficos. a  unidad y la abundancia que este cristal trae. El arco iris en el cielo es un puente que une el cielo y la tierra y representa la armonía. L@s chin@s llamaban al arcoiris el Tái chi o gran supremo, que une el yin y el yang. Cuando el As de Cristales aparezca en tu lectura, se está revelando un gran potencial, y en tu vida están presentes enormes posibilidades, porque esta carta representa un renacimiento dinámico en el nivel físico. Es probable que estés dando a luz a  algo mágico, una creación, un libro, una relación o una nueva fase de expresión de tí misma. Estás bendecida por la presencia del glorioso cristal que te ha traído este humilde gnomo. Un as en cualquier palo es un "Sí". Empieza de nuevo. Muchas ideas y sueños que han estado ocultos durante años se están revelando ahora.
Así que, ¿dónde nos sentimos en hogar? ¿para llegar? ¿para salir? ¿para cobijarnos a ratos? Antes en cursos de comunicación oral y escrita que realizaba con grupos de mujeres, muchas veces dibujando el espacio donde se sentían mejor, dibujaban el cuarto de baño- un espacio sin exigencias y donde podían cerrar la puerta. ¿Qué hogares tenemos? ¿Qué hogares anhelamos?

Quinto dia. Perséfone. ¿Qué Virgen? ¿Qué anciana?

Perséfone tiene algo de irritante para mí. No me gusta la gente que se hace la pequeña adrede... que de una forma no directa va "manipulando" la realidad. Comprendo también que me hace de espejo, para mirar en qué cosas de verdad me comporto como madura, o también tengo una niña "lateral", que sigilosamente "consigue" las cosas, los procesos en la vida. Además la amiga de hace más tiempo, que más asimilo con el arquetipo de Perséfone, me ha llamado hoy. A veces no la echo de menos conscientemente, pero cuando oigo su voz, se abre una ventana a las jóvenes que fuimos, y me apetecería estar con ella en el País de Nunca Jamás, eternemente jóvenes, con todo el tiempo del mundo por delante, tan "listas", y tan "guapas, y tan "completas", y tan deseosas de mundo. Ahora, cuando sé lo que cuesta amar la vida, permanecer en la esperanza y el corazón abierto en muchas situaciones... no puedo "protegerla", ni casi tenerla al lado de lo lejos que está, y casi nos gozamos mitológicamente, a salto de estaciones, o de años... pero logramos por momentos estar en el paraíso.
Jean Shinoda Bolen pone en primer lugar que Perséfone se identifica con Koré, la eterna niña que no se compromete con nada ni con nadie. Se toma todo el tiempo del mundo para decidirse, y como Wendy con Peter Pan y los niños perdidos vaga por el País de nUnca Jamás, hasta que un dia decide volver y comprometerse y madurar. Y much@s piensan, pobre, qué mal, hacerse mayor. En este mundo eternamente adolescente que habitamos, que no venera ni casi respeta a las personas mayores sabias, parece que el complejo de Peter Pan, o de Wendy o de Perséfone está muy extendido.
Cuando una mujer Démeter está deprimida hace que todos los que la rodean se sientan culpables, impotentes, o se enfaden por el reproche implícito que suscita... Una Perséfone puede estar muriéndose por dentro y casi no se nota. Es una carcoma interior la que la devora, de no sentir chispa. Su pasividad se acentúa y sus emociones se vuelven inaccesibles. Es como un ser sin sustancia y endeble... L@s otr@s se sienten separados de ella, que es quien se siente culpable y merecedora de reproche e impotente. Puede pasar a habitar un mundo sombrío de imágenes internas, reflexiones y vida imaginaria- un mundo al que sólo ellas tienen acceso. Después que Perséfone emergiera del mundo subterráneo, Hécate fue su compañera permanente. Diosa de la luna oscura y las encrucijadas, gobernaba sobre los reinos misteriosos de los fantasmas y los espíritus, la brujería y la magia. Cuando Perséfone se recupera, por ello es señora del submundo ya que sabe de paisajes extraños y tiene una gran capacidad de empatía y saber qué territorios extraños pueden atravesar otras personas y no se asusta... puede ser una buena terapeuta.

Al principio, cuando vuelve del mundo subterráneo, Démeter le preguntó, ¿has comido algo del mundo subterráneo? Perséfone le respondió que había comido algunos granos de granada, y mintió diciendo que los había comido porque Hades le había obligado a ello. Perséfone hizo lo que quiso sin perturbar la imagen que su madre tenía de ella. Al dar la impresión de que no controlaba su propio destino y que, por ello, no podía responsabilizarse, determinó su propia suerte. Al comerse las semillas Perséfone garantizó que pasaría parte de su tiempo con Hades. Consiguió ser la Diosa del Submundo... En un primer momento puede ser gracias a la no decir, a la mentira, a la manipulación...Al sentirse indefensas y dependientes de otras personas más "poderosas", las mujeres con un arquetipo muy marcado de Perséfone pueden aprender a conseguir lo que quieren de manera indirecta. Para crecer, como vías de crecimiento personal, una mujer Perséfone tiene que luchar con la Koré que hay en ella, y decidir cualquier vía de compromiso y seguirla. Con el tiempo, con su tiempo, puede volverse una mujer muy apasionada y en su cuerpo. Puede también descubrir una capacidad para la experiencia religiosa extática o desarrollar el potencial de percibir psicológicamente a otras personas. Ese carácter difuso de su personalidad, con su receptividad generalizada y falta de centro de enfoque, la puede ayudar a trascender la identificación con la Koré-doncella para encontrar el elemento Perséfone-Hécate que no tiene miedo de lo misterioso, y encuentra su lugar en el mundo misterioso-subterráneo.
Ayer hablábamos de la Virgen, la Virgen que somos y nos reconecta. Incluyo una lista de adjetivos: resonadora, velada, encarnada, conectada, erótica, ritmos naturales, sin temor, fecundidad, vivir en el ahora, poesía, luz en la oscuridad. Nosotras mismas como un todo. Sensación de totalidad. Fundamental para sanar. No hay que identificar a la Virgen con la Madre. Ella nace de la madre consciente en nuestro interior. Ella es materia que está siendo refinada, bailando entre llamas. En ella, las metamorfosis tienen lugar lentamente. La Virgen trae nueva conciencia, la conciencia que podría cambiar radicalmente la conciencia del planeta, y que en la nueva física la está cambiando.
La Anciana es la tercera de la trinidad femenina. Las palabras asociadas a ella empiezan a adquirir una dimensión diferente: atemporal, inespacial, desprendida, sin temor, libre, belleza, guía, Sabiduría, rendición, espontaneidad, paradoja. La profunda aceptación la une a la Virgen, a la Virgen transformándose eternamente en la madurez de la Anciana. La nueva sensación de libertad trae consigo una energía infantil: espontaneidad, juego, ideas creativas. Con su masculinidad bien desarrollada, puede poner sus ideas en juego en el mundo, ideas que confrontan la causalidad con  lo que Jung llamó sincronicidad.
Ella ha aprendido a amar sin agenda personal, y por eso es una excelente guía. Ella sabe lo fuerte y lo dulce que hay que ser para entrar en esta vida y para abandonarla. Ella guarda una sabiduría impronunciable en las células mismas de su cuerpo. La belleza y el horror de toda una vida están unidos en el amor.

Cuarto día. La diosa como lodo y cocodrilos. Lo indomado y relacionarse desde el yo.

La integridad en el amor
es la única guía cierta
hacia la sabiduría
que conduce a la libertad

Con esta dedicatoria a Sofía, Marion Woodman y Elinor Dickson, inician el libro Bailando entre llamas. La Diosa negra en la transformación de la conciencia. Son de ellas las palabras siguientes. Después de pasarme toda la mañana con Perséfone, he decidido reservarla para mañana, ya que el lado lodo y cocodrilo de la diosa, emergía en mi búsqueda y me arrojaba luz sobre las preguntas pertinentes para este trayecto y mis vivencias del último año, y que recalcaré en letras más gordas en el texto de ellas.


La otra cara del arquetipo materno se plasma en palabras como indomada, volcánica, terrible, voraz, Diosa de la Muerte, Devoradora de la oscuridad.
Cuando se trabaja con estos atributos, hay que reconocer la diferencia entre energía arquetípica y energía de la persona. La energía arquetípica lleva una carga mucho más potente que la energía de la persona; es como la diferencia entre un relámpago y el graznido de un pato. Jung entendía el arquetipo como un campo de energía magnética en el centro del complejo de la persona. En torno a nuestra madre personal o a la pérdida de nuestra madre personal, construimos respuestas potentes, psicológica y físicamente. Estas respuestas vienen cargadas de sentimientos uterinos, preverbales, de nuestra primera infancia. Reverberan en nuestras respuestas frente a las mujeres en general.
En el centro del complejo materno está la madre arquetípica, la Diosa. Es imposible ver el arquetipo en sí. Es un campo de energía potencialmente magnética al que fijamos una imagen que acaba proyectándose hacia fuera. Esta energía atrae y repele a otros seres que entran en su orbita. Es más atrae, o repele al yo con tal intensidad, que es capaz de anular la conciencia hasta el punto en el que el yo deja de estar presente para poder elegir, ya sea así, o no, o quizás.
Ahora bien, el lodo y los cocodrilos albergan una energía creativa inmensa, siempre y cuando no nos absorban. En las adicciones, cuando las personas se hunden en el lodo de la madre cocodrilo cuando hincan el diente en la segunda magdalena, o toman dos tragos de una botella de whisky, o dan un beso “de más”, o hacen demasiado de aquello que es su lodo. En sus ojos vidriosos se puede ver el momento en el que la energía arquetípica derrota al yo. No hay nadie en casa. Cuando el contenedor del yo no es lo bastante fuerte para relacionarse con ese poder luminoso sin identificarse con él, se impone la destrucción. Identificarse es “convertirse” en el Dios o la Diosa sin el fundamento femenino necesario para restablecer las fronteras que nos devuelven a nuestra humanidad. Relacionarse es saber que el yo es el instrumento a través del cual fluye la energía divina. La Callas se relaciona tanto cuando honra a lo divino por su talento, como cuando baja del escenario y se convierte en la sencilla mujer, que disfruta de su plato de comida.
En las primeras fases del aprendizaje de cómo relacionarnos con la energía arquetípica, solemos pensar en lo arquetípico como si tuviera dos caras opuestas. Cuando hacemos asociaciones con la Madre, por ejemplo, pensamos en la madre positiva como lo femenino nutricio, amoroso, protector. En Occidente, separamos estas características de la voraz, devoradora, terrible Diosa de la Muerte. Al mismo tiempo, sabemos que si no logramos salir del nido acolchado de nuestra adolescencia, es probable que nos veamos incapaces de vivir en libertad. Quizás entonces sintamos el impulso de encontrar otra madre que nos arrebate tiernamente nuestra fuerza.
Sí, por otro lado, nos crió una madre juzgadora, es posible que asimiláramos su fuerza con el fin de sobrevivir. Por el mero hecho de luchar con ella día tras día, al final nos pusimos en pie con nuestras propias fuerzas liberadas. Y libres para encontrar una pareja liberada, libres para crear una relación de pareja madura.
Una perspectiva más amplia nos indica que, en última instancia, las palabras positivo y negativo no son aplicables. Se convierten en palabras justicieras. Lo cierto es que la Diosa que da la vida es la misma que la arrebata. Este hecho no acepta sentimentalismos. En el pensamiento femenino, convivimos con la paradoja más allá de las contradicciones. Ella es la corriente de vida donde la creación da lugar a la destrucción, donde la destrucción al servicio de la vida da lugar a la creación.
Las relaciones en nuestra cultura están en crisis en torno a lo maternal. Durante siglos, lo maternal ha sido sinónimo de feminidad, y muchas personas todavía piensan que nuestra feminidad está bien desarrollada, si se manifiestan los aspectos nutridores, sólidos como la roca, de la madre. Sin embargo, si volvemos a mirar con un par de lentes nuevos, tal vez se nos planteen preguntas nuevas:- ¿He establecido límites manejables para mis hij@s? ¿Les sirvo de espejo, reflejándoles sus propios sentimientos y valores, o espero que ell@s me sirvan de espejo a mí? ¿Soy una persona dependiente de su dependencia con respecto a mí? ¿Actúo desde el poder o desde el amor? ¿Me identifico con lo maternal? ¿Soy madre consciente?
En las relaciones lesbianas y homosexuales, estas preguntas son igualmente relevantes, ya que lo maternal forma parte de toda relación.
También l@s héroes/heroínas solares tienen que lidiar con un idealismo destrozado, teniendo miedo de la feminidad. Quizá sepan que las matriarcas/patriarcas no pueden aceptar la realidad de sus hij@s:
-         ¿Quién soy yo cuando se hacen añicos los ideales? ¿Qué aspectos de mí misma no puedo afrontar? ¿La codicia, la lujuria, la violencia? ¿Quién soy yo sin mis infladas fantasías?
Para pasar a ser persona madura necesitamos fuerza para aferrarnos a la totalidad, a la humanidad entera, sombra incluida. Esta humanidad está fundada en el amor que mantiene unidas a todas las células del cuerpo.
Y a tod@s nos conviene recordar que lo maternal es sólo un aspecto de la feminidad. Si no lo hacemos, en el engreimiento de ser madres conscientes, cuando un día nuestra pareja nos responda desde un lugar que no sea la madre, el impacto nos sacará de nuestra suficiencia. Lo femenino que lucha por encontrar su propia voz viene del arquetipo de la Virgen. No es la voz que viene de la garganta oprimida y las espaldas militares del complejo patriarcal que dice” Ésta soy yo y esto es lo que quiero.”
El verdadero trabajo en muchos problemas relacionales está en separar la nueva feminidad, la propia Virgen, del complejo materno. Así, en lugar de actuar desde respuestas introyectadas y automáticas, la virgen aprende a vivir espontáneamente desde las emociones y los valores que tienen su fundamento en su propia musculatura. La virgen iniciada es lo femenino, que es quien es porque ésa es ella. Como la selva virgen, está llena de su propia fuerza vital, llena de potencial, preñada. Sus características no pueden separarse completamente de la madre y de la anciana. Confiamos, que algún día, madre, virgen y anciana, serán un todo integrado.

Tercer día de búsqueda. Démeter y qué nutrición nos damos a nosotras mismas.

En el principio era la mujer y era triple. Era la diosa lunar que presidía las etapas de la vida: generación (la hilandera del hilo de la vida); crecimiento (la medidora del hilo según sale del huso); y muerte (la cortadora del hilo).
En los primeros mitos griegos, se puede entender la triple naturaleza de la diosa. En el principio había tres diosas: Tetis, que personificaba el mar, Nix que era el cielo o la noche, y Gaia, la tierra. L@s hijas de Gaia eran las diosas y dioses olímpicos entre las que se contaban Démeter y Hera, y también Zeus por ejemplo; están relacionad@s con la mente consciente. L@s hij@s de Tetis, que surgen del mar, son de carácter diferente. Están entre la mente consciente y el inconsciente, en otras palabras son parte del subconsciente. Las hijas de Tetis incluyen a Afrodita, una diosa solar, Metis (Medusa), y Europa (diosa lunar identificada con Hathor). Tetis es también madre de las Gorgonas, las Greas y las Sirenas, todas ellas están en la antesala de lo desconocido. Estas tres tríadas son las guardianas detrás de las que residen otras figuras más peligrosas. Unas son hermosas como las Sirenas y otras lo fueron anteriormente, como las Gorgonas y las Greas.
De Nix proceden las figuras más oscuras. Hécate es hija de Nix, como lo son las tres parcas (Moirae), Némesis, "la actuación debida" o la diosa que odia las palabras presuntuosas y trae la destrucción de l@s arrogantes), las Erinias (Furias) y las Hespérides. Las Hijas de la Noche nos introducen profundamente en el inconsciente, pero actúan también como guardianas para quienes no se quien aventurar a entrar. Hécate es el pasadizo al submundo, las Erinias protegen la línea de sangre para que las hereden las generaciones futuras, y las Hespérides, que están en el extremo occidental del mundo, son las guardianas de nuestra "necesidad más íntima de inmortalidad".
La pregunta de hoy, el peldaño de la búsqueda, es ¿con qué tipo de personas nos relacionamos? ¿Qué nutrición nos ofrecemos? ¿Qué nutrición ofrecemos?
Llevo días preguntándome si cortar absolutamente el contacto con una persona a la que amo. Hacia la que existe amor, pero no puedo ya relacionarme... No hay suelo, y cada paso se ha convertido en un andar sobre arenas movedizas. Del sol en el interior no dudo, es de la pertinencia de las interacciones...
Ayer, releyendo fragmentos de Shinoda Bolen, me venía seleccionar el fragmento en el que muestra los diferentes tipos de relaciones que establece Démeter en sus relaciones amorosas. ella hablando de las relaciones heterosexuales, pero podría hacerse más extensivo, comenta varios patrones, de los que incluyo dos.
Un tipo común de pareja en el que la mujer es Démeter, encaja en el patrón de la Gran Madre emparejada con su hijo-amante. Esta relación arquetípica madre-hijo no se refiera a una diferencia de años. Habitualmente, es un hombre sensible y con talento, que se siente poco apreciado o comprendido por los demás, que no valoran su singularidad como ella lo valora, y que no toleran su irresponsabilidad. Más que un hombre, es un niño inmaduro con un sentimiento de singularidad. Ella está de acuerdo con su autoafirmación y continuamente tolera su conducta con respecto a ella, que los demás consideran egoista y desconsiderada. En opinión de ella, el mundo es cruel con él. Debería hacer excepciones con él, como hace ella. Su falta de consideración suele herirla y enfadarla, pero cuando él le dice cuanto la aprecia, o que ella es la única persona en su vida que realmente se preocupa por él, todo es olvidado de nuevo.
Las cualidades maternales de la mujer con el arquetipo Démeter muy marcado en un momento, la hacen vulnerable a las manipulaciones, a que pueda ser utilizada por un/a sociópata. La relación Démeter-sociópata puede parecerse a primera vista a del hijo(a)-amante. Existen solapamientos, pero el hijo-amante tiene la capacidad de amar, ser leal o tener remordimientos. La persona sociópata carece de estas capacidades. Actúa sobre la presunción de que sus necesidades le justifican para recibir. Es incapaz de intimidad emocional o de sentimientos de aprecio. Su actitud podría simbolizarse con la pregunta: ¿Qué has hecho por mí últimamente? Olvida la generosidad o los sacrificios anteriores, así como el comportamiento de explotación. Exagera sus necesidades, y es ese estado de necesidad el que suscita la respuesta generosa de Démeter. La relación con una persona sociópata puede atar la vida emocional de una mujer Démeter durante años y puede empobrecerla económicamente.

La mujer Démeter, cada una de nosotras, debe escoger cuándo, cómo y a quién dar.
Y preguntarnos si esa nutrición es infinita, si lo hacemos por que no sabemos hacer otra cosa, si es nuestra manera más aprendida de hacer que nos quieran... Una mujer Démeter que es incapaz de decir no, conseguirá verse sobrecargada. Puede llegar a estar agotada o apática, resentida o enfadada. Muestra conductas agresiva.pasiva. Abandona obligaciones que se suponía que tenía que cumplir, expresa su hostilidad con una conducta nada complaciente y afirma su independencia.
Doy, porque quiero, y a quien quiero, por el bien de tod@s l@s implicad@s.

He escogido incluir el búfalo, además de haberme salido en la tirada de animales de Karina Malpica, porque es el animal que mejor ejemplifica esa disponibilidad: abundancia, generosidad y hospitalidad. En su sabiduría nos aporta valor femenino, disfrutar los retos, el poder de la gratitud, compartir el trabajo, dar para el bien mayor, conocimiento de rituales y formular planes beneficiosos.

El búfalo sagrado escoge guiar a las almas de las personas que se han comprometido a dar lo mejor de sí mismas para el bien mayor de su colectividad. Es un guía de almas dedicadas enteramente al servicio. A ellos les ayuda a formular planes beneficiosos, a compartir y distribuir el trabajo, a disfrutar de los retos y a agradecer de antemano la ayuda del Gran Espíritu y de tod@s l@s involucrad@s en cada uno de los múltiples proyectos en que estas nobles almas suelen participar o en los que emprenden a partir de su propia visión de las necesidades de los demás. L@s fundadores de organizaciones altruistas, trabajadores sociales, maestr@s rurales, enfermer@s, misioner@s, filántrop@s, mecenas, patrocinadores, y promotor@s de organizaciones civiles suelen estar bajo su protección. Pero también lo están muchas otras almas que no tienen una ocupación definida y que, sin embargo, se entregan a los demás en todo aquello que humilde y discretamente realizan día con día.

Consejo del Búfalo: Te animo a que participes en algún ritual o ceremonia sagrada en caso de que recibas una invitación. También puedes organizarla o recrearla tú misma.
 Invoca mi ayuda y te inspiraré.
 La Mujer Ternera de Búfalo Blanco es la hija del Sol y de la Luna y viene a la Tierra como wajan, mujer sagrada, en momentos críticos para enseñar a la humanidad. Para los indios de las llanuras es Whope, “la diosa de la estrella fugaz“; y Ptesan Wi, “mujer ternera de búfalo blanco” para los sioux. Es un ser sagrado de origen sobrenatural que apareció de una misteriosa nube hace 2000 años, bendiciendo a los sioux con 7 rituales y un fardo sagrados. Uno de los regalos que este contenía era la chununpa, o Pipa Sagrada, el más sagrado de todos sus símbolos de culto. Aunque normalmente se le llame la Pipa de la Paz, la chununpa se utiliza también en otras ceremonias. La Mujer Ternera de Búfalo Blanco se apareció a dos hombres durante el rito de búsqueda de una visión, con ocasión de una hambruna, y prometió a los sioux que regresaría siempre que el mundo estuviera en peligro. Ptesan Wi, por su parte aseguró que, mientras el pueblo respetara las ceremonias y tradiciones sagradas que ella les había dado, serían guardianes de la Tierra y nunca se extinguirían.

Meditación Propuesta por Julie Loar en Diosas para cada día.

Elijo una manera de honrar lo sagrado que hay en mi vida y me tomo el tiempo necesario para penetrar en ese poder.

Segundo día de búsqueda. Démeter y el rapto de Perséfone.

De la rueda de la Diosa del Templo de Avalon, es esta imagen de la diosa de la cosecha. Hoy segundo día de la búsqueda. Sigo sin encontrarme bien, más voy buscando más allá de mis síntomas, el encontrarme mejor y sonreir.
Jean Shinoda Bolen, en su libro Las diosas de cada mujer, la incluyó en las diosas vulnerables. Es decir, diosas orientadas hacia la relación, cuya identidad y bienestar dependen de tener relaciones significativas. Expresan las necesidades de afiliación de las mujeres.
Démeter: diosa de las cosechas, nutridora y madre. Presidía las recolecciones abundantes. L@s roman@s la conocieron como Ceres (de donde proviene nuestra palabra cereal). Se la describe en el himno a Démeter de Homero, como "esa sobrecogedora diosa, de hermoso cabello... como su espada de oro" (¿la espiga de oro maduro?) Se la representa como una bella mujer de cabello dorado y vestida con túnica azul, o como una matrona sentada en las esculturas.
Parte del nombre de Démeter, meter, parece significar madre. Madre de la joven Perséfone, para l@s roman@s Proserpina.
La historia narrada de Démeter comienza con el rapto de Perséfone. Perséfone estaba cogiendo flores en un prado con sus compañeras, cuando fue atraída por un narciso asombrosamente bello. Al acercarse para cogerlo, el suelo se abrió ante ella. De las profundidades de la tierra emergió hades en su carro de oro tirado por caballos negros, le arrebató y se sumergió en el abismo con la misma rapidez con la que había llegado. Perséfone se debatió y gritó pidiendo ayuda a Zeus, pero nadie la ayudó.
Démeter escuchó los gritos de Perséfone y salió corriendo en su ayuda. Buscó durante nueve días y nueve noches a su hija raptada, por toda la tierra y por todos los mares. No se detuvo ni un instante para comer o para lavarse en su frenética búsqueda.
Al atardecer del décimo día, Démeter encontró a Hécate, diosa de la luna oscura y de las encrucijadas, que le sugirió acudir juntas a Helios, dios del sol (una deidad de la naturaleza que compartía este título con Apolo). Helios les informó de que era Hades el que había raptado a Perséfone y de que la había llevado al mundo subterráneo para ser su novia a la fuerza. Comentó que Zeus lo sabía.
Démeter se sintió ultrajada y traicionada por Zeus, padre de Perséfone, y también afligida. Se marchó del monte Olimpo, disfrazada de vieja, y vagó de incógnito por ciudades y campos. Un día llegó a Eleusis, se sentó junto al pozo, donde fue encontrada por las hijas de Celeo, rey de esa ciudad. Algo de su porte y de su belleza las había atraido hacia ella. Cuando Démeter les dijo que estaba buscando trabajo como niñera, la llevaron a casa ante su madre Metanira, ya que tenían un hermano recién nacido, al que querían mucho llamado Demofoonte. Bajo los cuidadeos de Démeter, Demofoonte creció como un dios. Le cuidó con ambrosía (el manjar de los dioses) y en secreto lo mantuvo en un fuego que le habría hecho inmortal, si no hubiera sido por la intervención de metanira que empezó a gritar temiendo por la vida de su hijo. Démeter reaccionó con furia, regañó a Metanira por su estupidez y le reveló su verdaera identidad. Al manifestar que era Démeter, la diosa cambió de tamaño y de forma, revelando su belleza divina. Sus cabellos dorados cayeron sobre sus hombros, su fragancia y su resplandor llenaron la casa de luz.
 
Démeter ordenó entonces que construyeran un templo para ella. En él se instaló, se sentó sola con su pesar producido por la ausencia de su hija raptada, y se negó a cumplir sus funciones. Como consecuencia, nada podía nacer ni crecer. La hambruna amenazaba con extinguir la raza humana. Privando a los dioses y diosas de su ofrendas y sacrificios. Al final, Zeus se dió por enterado. Primero envió a Iris, su mensajera, a implorar a Démeter que volviese. Después, como Démeter permanecía inamovible, cada deidad del Olimpo acudió, a su vez, llevándole regalos y presentándole honores. Furiosa, Démeter hizo saber a cada una de ellas que no pondría el pie en el monte Olimpo ni permitiría que nada creciese hasta que Perséfone le fuera devuelta. Por último, Zeus respondió. Envió a Hermes, el dios mensajero, a Hades, ordenándole que devolviera a Perséfone, para que "su madre, al verla, con sus propios ojos, abandonara su cólera". Hermes bajó al mundo subterráneo y encontró a Hades sentado en un diván junto a una Perséfone deprimida. Al escuchar que era libre para irse, Perséfone se regocijó y saltó de alegría para acompañar a Hermes. Pero, antes Hades le dió algunos granos de granada, que ella comió.
Hermes tomó prestado el carro de Hades para llevar a Perséfone a su hogar. Los caballos volaron veloces desde el mundo subterráneo al mundo superior, deteniéndose frente al templo en el que Démeter estaba esperando. Cuando ésta les vio, Démeter acudió corriendo, con los brazos extendidos para abrazar a su hija, que a su vez se lanzó con igual alegría alos brazos de su madre. Entonces, Démeter le preguntó ansiosamente si había comido algo del mundo subterráneo. Si no había comido nada, Perséfone le sería devuelta íntegramente. Pero, como había comido los granos de la granada, debería pasar dos tercios del año con Démeter y los restantes meses en el mundo subterráneo con Hades. 
Una vez juntas, madre e hija, Démeter devolvió la fertilidad a la tierra. Después proporcionó los misterios eleusinos. Estos eran ceremonias religiosas sobrecogedoras, que se prohibía revelar a los no iniciados. mediante dichos misterios, las personas obtenían una razón para vivir con alegría, y morir sin miedo a la muerte.
Démeter es el arquetipo de la madre. Representa el instinto maternal, realizado a través del embarazo o del suministro de alimento físico, psicológico o espiritual a l@s demás. Esta persona nutridora puede entrar en crisis cuando es puesta en cuestión su función, la pertinencia de ese dar... Cuando la Démeter afligida deja de funcionar, nada crece... el aspecto destructivo de Démeter se expresa reteniendo lo que otros necesitan... Vivir la autonomía de los otros/as como pérdida emocional propia. Al sentirse menos necesitada y rechazada, puede estar deprimida y enfadada. La señora de la Abundancia se congela y congela a l@s otr@s.
En la triada, doncella, madre, anciana... estamos todas. ¿Qué nos pasa cuando nuestro alimento es rechazado? ¿Cómo son nuestras crisis? 
Una mujer Démeter debe hacer frente a la diosa una y otra vez, si es que quiere tomar a cargo su propia vida. En lugar de un instintivo "si", debe ser capaz de escoger cuándo, cómo y a quién dar. Para hacer esto, necesita aprender a decir no, tanto a la persona que necesita algo de ella, como a la diosa dentro de ella. Y, una mujer Démeter, puede aceptar, la existencia de cambios humanos estacionales. Una sabiduría de la tierra que refleje la naturaleza. Una mujer así, cualquiera de nostras, podemos aprender, que es posible vivir superando cualquier hecho que nos suceda, y sabiendo que lo mismo que la primavera sigue al invierno, la experiencia humana cambiante sigue ciertos patrones...

Empezando la búsqueda. Días de Démeter.

                “Basta con permanecer inmóvil el tiempo suficiente
 como para que el espíritu nos encuentre" Clarissa Pinkola Estés
Desde ayer, estoy rara, he estado vomitando y me vuelve a doler el oído derecho. Ha empezado a pensar en las preguntas de Démeter, en cual es su búsqueda, y mi búsqueda. Hoy, como primer día después de la luna nueva, empiezan mis nueve días de búsqueda. Mi cuerpo quiere cama, fuera llueve, los gatos del barrio quieren caso...y yo, quiero silencio.
 
La imagen que vendrá a continuación es la obra "Persephone and Demeter" de  Susan Seddon Boulet (1941-1997). Empecé a conocer su obra en ilustraciones a relatos de Ursula K. LeGuin.
En este proceso de Démeter y Perséfone, sanamos nuestra relación con la madre. Con nuestra madre y la madre en nosotras. Hace poco tiempo realizaron un taller cuyo nombre era Sanando la herida con la madre de Bethany Webster. El texto que acompañaba la propuesta era el siguiente traducido por Sophia Style,  Mónica Mansó e Isabel Villanueva.
- Si pensamos en nuestro desarrollo personal, la relación con nuestra madre sirve como patrón para la relación con nosotras mismas. Como hijas, absorbimos de nuestra madre información sobre lo que sentía hacía ella misma, lo que sentía hacia nosotras, y lo que sentía hacia el mundo.
Aprendimos a tratarnos de la misma manera que nuestra madre se trató a ella misma. Nuestra tarea como mujeres conscientes radica en transformar la madre interna dentro de nuestra psique creada a partir de nuestra madre biológica con sus limitaciones humanas en la madre que siempre necesitábamos y queríamos.
Podemos convertirnos en la madre que siempre queríamos –hacia nosotras mismas. De esta manera, somos capaces de aceptar las limitaciones de nuestra madre externa, porque nuestra madre interna se convierte en la madre primaria con la que podemos contar, de formas en que quizás nunca hemos podido contar con nuestra madre externa.Nuestra madre solo podía amarnos de la manera que podía amarse a ella misma. En un momento dado, debemos enfrentar el hecho de que nuestra madre no pudo y no va a poder satisfacer nuestras necesidades de la manera que necesitábamos y queríamos. Esto significa pasar por un proceso de duelo. Un duelo por la forma en que tuvimos de compensar y sufrir la herida materna.
En el proceso de duelo, tenemos la oportunidad de darnos cuenta del hecho de que si nos sentimos amadas o abandonadas no fue por nuestra culpa. Sólo entonces podemos abandonar la lucha para demostrar nuestra valía en el mundo. En el proceso de duelo, también podemos tener compasión por nuestra madre y la carga que llevaba.
Al sanar tu madre interna, transformas tu vida más allá de lo que puedas imaginar.
Al confrontar este dolor, podemos darnos cuenta de que lo que pensábamos que era nuestro dolor es en realidad parte del dolor de nuestra madre que nosotras hemos llevado por amor. Ahora podemos elegir dejar esta carga. De esta manera, en lugar de atenuar nuestro sentimiento de culpa, podremos sentir la confianza en nuestros cuerpos y en nuestros corazones para así desarrollar un sentido de auténtica plenitud y amor propio.
Al convertirnos en la madre “suficientemente buena” para nosotras mismas, nos liberamos no sólo a nosotras mismas, sino también a todos aquellos que conforman nuestra vida.
Es un reto reconocer ante nosotras de que manera no fuimos amadas en nuestra relación con nuestra madre. Al recordar y ver lo cargada y abrumada que estaba pudimos pensar que éramos la fuente de su dolor. Esta “hija culpable” puede mantenernos estancadas. Una forma de liberar nuestra culpa es reconociendo la inocencia y legitimidad de nuestras necesidades infantiles. Es una forma de liberarnos de la vergüenza y bautizarnos a nosotras mismas en nuestra bondad y divinidad. Una vez hemos atravesado el duelo por nosotras mismas, entonces podemos comenzar el duelo por nuestras madres y por todas las mujeres.
El duelo nos repone y nos fortalece.

Como mujeres, podemos sanar y darnos lo que nuestras madres no nos podían dar. Podemos convertirnos en nuestra propia fuente. El “dolor corporal” del colectivo femenino es sanado una a una. Y a medida que el dolor corporal femenino se cura, lo mismo ocurre con el dolor de la comunidad humana. Nuestra propia sanación no es sólo un regalo para nosotras mismas, también lo es para el mundo.
La herida de la madre es una gran oportunidad.

Conforme nos permitimos contactar con lo que se siente como un hambre antigua, inagotable para una madre inagotable, nos damos a luz a nosotras mismas en nuestra verdadera identidad – la matriz de luz- una fuente inagotable, desbordante de amor y abundancia que no depende de las circunstancias o condiciones. Entonces podemos vivir al servicio de lo que realmente somos- el amor mismo.

La Luna Nueva en el séptimo signo del Zodíaco, Libra- Noche del 23-24 Septiembre

Ya estamos en la Luna Nueva en el séptimo signo del Zodíaco, Libra. Se forma en la mañana pronto del Miércoles 24 de Septiembre, un día después que Plutón se estacione directo por última vez este año y concluya este periodo retrógrado que comenzó el 15 de Abril. También marcó el punto casi exacto de la Gran Cruz Cardinal, que representa el signo de estos tiempos, llenos de deseos de Independencia, de toma de consciencia de la corrupción de las grandes instituciones, la caída de muchos mandatarios, tiranos y grandes empresas, la necesidad de renovación de muchas de las grandes instituciones que tan silenciosamente hemos obedecido por décadas. Plutón en su moción directa nos impulsa a reanudar el camino, a tomar muy en cuenta las lecciones aprendidas en estos últimos meses y aplicar estos conocimientos a nuestro nuevo tramo de vida.

Este es un momento para reflexionar y hurgar en nuestro interior y comprobar si realmente estamos en un punto, donde algo desde dentro nos grita, paz! paz!  Qué tenemos que resolver, que nos haya tenido angustiad@s en el pasado y qué ahora de alguna forma, necesitamos solucionar sin violencia, sin ánimo de más discusión, simplemente tratando de encontrar un compromiso, para que las dos partes obtengan, si bien no, todo lo que quieren,  al menos lo suficiente, para quedarse tranquil@s y poder encontrar una verdadera y duradera solución a situaciones que tienen a las dos partes infelices.
Esa es la lección de este signo de aire, Libra. Esta Luna Nueva se forma a 1ºLibra07′, por tanto el Sol y la Luna se encuentran en conjunción y en línea con el SGC, el Super Centro Galáctico, ubicado a unos 2º de Libra, ese inmenso agujero negro, devorador y emitidor de energías y ondas electromagnéticas. Y tú te preguntarás: “Y?”. Yo me voy un poco a la simbología y veo a esto como una enorme lupa, que de alguna manera exagera tremendamente el significado de  esta Luna Nueva en Libra. Por tanto la necesidad de encontrar un compromiso en nuestras relaciones personales, valorando lo que tenemos y por sobretodo, dejando de esperar que el “otro” sea TODO, lo que nosotros deseamos que sea, que nos dé TODO, lo que nos falta en esta vida para ser feliz.  Cada parte, ya sean personas, países, continentes, tienen sus propias necesidades, defectos y talentos. El trabajo a realizar en la experiencia Libra, es encontrar un balance entre estas cosas en la asociación con otr@s. Comunicar nuestros deseos para que la otra parte los comprenda y aceptar cuando la otr@ no puede darnos lo que queremos o deseamos y viceversa. Lo que nosotr@s necesitamos debemos encontrarlo en nuestro interior, no esperar que otra nos lo provea. Si no puedes hacer realidad tus sueños, entonces debes analizar por qué. Quizás estés buscando en el camino erróneo. La palabra es ACEPTACIÓN. Tod@s nacemos con la capacidad de vivir nuestro destino y desarrollar lo que necesitamos desarrollar. La “otra” es una compañera de viaje, para que la vida sea menos solitaria y un espejo extraordinario para poder conocernos mejor.
Eris se encuentra en línea con los Nodos lunares para esta lunación como si nos recordase que la discordia es parte del proceso, y que sin ella, no tendríamos nada que resolver. Siempre alguna de las partes en una relación se siente dejada de lado. Pallas también es parte de este aspecto oponiendo a Eris, por tanto el mensaje aquí quizás es de tomar las riendas de nuestro destino y dejar de culpar a la otra por sentirnos de esa manera. Nadie tiene la “culpa” de nuestra infelicidad excepto nosotras mismas. Juno forma un fantástico Gran Trígono a Saturno y Quirón augurando la solución a estos conflictos. Relájate y Confía.
El 22 de Septiembre cuando el Sol pasa por el 0º de Libra, marca el equinoccio de Otoño en el H.S. y el de primavera en el H.S. el punto cuando el día y la noche tiene la misma duración, otro símbolo extraordinario de este ángulo Aries-Libra y  un momento celebrado con rituales en todo el mundo, justo cuando el Sol se alinea con el Ecuador. Este punto de reducción del campo magnético de la Tierra, parece ofrecernos la posibilidad de ver con calma qué es eso que queremos atraer a nuestras vidas, qué debemos corregir para reanudar nuestro camino de una forma más de acuerdo con las necesidades del alma. De Venus, el planeta regente de Libra, obtenemos el concepto de Belleza, Balance, Armonía, Creatividad, Supervivencia, y por sobre todo el concepto de que TODAS tenemos lo suficiente para nuestro recorrido y debemos encontrar en nuestro interior aquello que tiene un inmenso valor no sólo para nosotras mismos sino para el mundo.
Los signos cardinales, Aries, Cáncer, Libra y Capricornio, son los más afectados por esta lunación y los signos de Aire: Géminis y Acuario, los más beneficiados.
Usa las energías de esta Luna Nueva en Libra para evocar en tu alma, lo que necesitas a partir de ahora para hacer tu camino más llevadero y más feliz. Usa todo lo que te haya pasado en estos últimos meses como diccionario de viaje y no olvides las lecciones aprendidas. ¡Libra nos ayuda a vivir en GRATITUD! (Ya sabéis que mi astróloga de referencia es Cristina Laird, y la información proviene de ella. Gracias Cristina.)