¿Sientes que había un pequeño rincón en el que sembraste ilusiones, le dedicaste atenciones y le sonreiste? Hubo un jardín que arropó mis sentidos y me abrió el corazón a lo posible, a lo por vivir. Me ayudó a renacer. Hay un montón de pesos para sostener algunos mundos y el corazón necesita alegría... Los elementales siguen sosteniendo a distancia lo que ahora casi no puedo sostener. Y esa alegría vive desde un presente aflojado.
Y en él, descansé y no me exigí y fui feliz. De Ser.