¿Qué razón podría existir aún para continuar con las cosas que generan infelicidad en nosotras mismos y en las demás? [...]
Nuestro poder comienza cuando salimos de la inconsciencia. Ya no nos permitimos ser persuadidas de que no podemos hacer una diferencia. De que existe una buena razón por la que las cosas en el mundo deban continuar sucediendo. De que sería bueno para nosotras adaptarnos al mundo como está. Estar encarceladas por la imagen burguesa de carrera y futuro, en las interminables mentiras de la hipocresía burguesa.
Ya no permitimos que nos encajonen en la jaula burguesa de las relaciones de amor que son demasiado pequeñas, que bloquean el camino a mayores posibilidades de amor en este mundo.
Estamos siendo parte de una guerra global cuando confundimos amor con posesión, que entonces creemos que debemos proteger de otras personas.
Permitámonos dejar atrás esta locura, y dejar atrás esta interminable desconfianza del otro, que no permite que el poder sanador de una revolución positiva surja. Permitámonos entrar en la verdad y la solidaridad entre los hombres y las mujeres. Juntas, permitámonos construir la confianza que todos necesitamos para nuestra curación.
Permitámonos crear lugares donde podemos nuevamente confiar en las voces de nuestros corazones. Juntas, permitámonos encontrar canciones, palabras y acciones para construir un mundo que valga la pena vivir.
Da tu poder de servicio y revolucionario al mundo, pues te necesita.
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