Estamos con la energía de Virgo. Poniendo orden, nutriendo...La famosa vuelta a casa... En el eje de esta luna llena que será el 2 de Septiembre, Sol en Virgo, luna llena en Piscis.
Hace poco, los poemas de María Monjas en Nadie hablará de nosotras.
Cito dos de ellos:
Desubicada
y sin tener muchas ganas
de encontrar la salida
ni la entrada.
Y otro que tiene que ver con el bello concepto de volver a casa, ahora bien, ni nunca es la misma casa ni nunca somos las mismas, como ya decía Heráclito.
Ella cita en su poemario a Concha M. Miralles: La casa guarda vapores que adormecen y raíces invisibles que suben de la tierra cada noche para atarte las muñecas mientras duermes. Odia los planos, los itinerarios y los mapas, que escupiría sin piedad de sus paredes (si has de irte, guárdate el secreto).
Volver a casa
es otra de las frases que se dice
sin saber muy bien lo que se dice.
Como si realmente hubiera
caminos de ida y vuelta
como si existieran casas
a las que volver siendo otra.
O más bien, digo yo, el eterno volver a casa,
es la nómada que lo intenta una y otra vez,
¿existen susurros de raíces?
¿existen simulacros de mapas?
¿algo más allá de cartografías variables?
Mi casa, se mueve, siempre,
es un barco en el surcar incertidumbres,
posibilidades
en un camino hacia Itaca,
desde el baile de Artemisa en el bosque,
y la sirena de Tabarca...
como si alguna vez hubiéramos
podido creer que seguíamos siendo las mismas.
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