Segunda mitad de Agosto. En Jaca. Paz y centro.

Parto de nuevo desde mi centro. Quietud. La vuelta a casa. Soy yo entera y merecedora. Ando y encuentro porque soy. Me siento agradecida de todo cuanto me ha sido dado.

Estoy en Jaca, viendo lo maravilloso de los Pirineos, y sintiendo parte de la energía del camino francés a Santiago, a Finisterre. Mi coche decidió pararse y eso me ha dado otro tiempo aquí, paseando con Blanca, leyendo muchas cosas medievales y fantásticas y filtrando. Mucho verde, excursiones a San Juan de la Peña, San Adrián de Sásabe, Santa Cruz de Serós... La poza fría de Aísa, el bosque de las mariposas, las niñas hablando en castellano y en francés en la calle al lado del río en Borau. Incluyo imágenes de San Adrián que tiene una energía muy especial, sobre todo en la zona cerca del altar.

Siento como se aproxima Septiembre, más sé que he tenido tiempo,. tiempo eterno y tiempo fuera del tiempo, tiempo terrenal y calendario. Todo ello, mezclado a sincronías, a regalos del universo, amigas del camino, espejos, perros y perras que han jugado con Blanca, relaciones sociales que brotan del amor a los animales...
 Espero que hayáis podido respirar por los poros, yo sé a veces lo que es no parar y lo que es "simular" la paz. He tenido paz, la sigo teniendo y confío que este tiempo en Jaca me está dando casa, porque me mima... Mañana empieza la feria de las tres culturas, y ello además de los festivales del amor, pienso que son actividades que nos pueden a algunas Lobas en el futuro mover la imaginación y hacer propuestas.

He estado leyendo el árbol del cielo de Edith Pargeter, muy hermoso sobre un maestro constructor en la Edad Media, y muy interesante también como a veces utiliza un pseudónimo masculino Ellis Peters. Y desde que he llegado aquí complicidades de Avalon, Camelot, una película sobre un Arturo muy romano y una Ginebra muy britana que me reconcilió con Ginebra... Felicidad tranquila y libertad.

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