El poder invisible de los círculos de mujeres actúa en dos niveles. Un círculo de mujeres puede parecer que es simplemente una serie de mujeres que hablan entre sí; pero si es un círculo, y especialmente un círculo con un centro espiritual, provocará un efecto invisible en las mujeres que lo componen. Un segundo poder invisible consiste en la posibilidad de que cada círculo está contribuyendo a crear la masa crítica que pondrá fin al patriarcado. Este es el efecto que tiene en la cultura el millonésimo círculo.
Este fue nuestro círculo desde el 2001 hasta 2006. Esta foto está hecha en el 2004, cuando empezábamos en La Loba, y estábamos realizando un taller del eneagrama, para conocernos mejor, para apoyarnos...
Un círculo de mujeres que confían unas en otras puede llegar a ser también un receptáculo de sanación, sobre todo si las mujeres que lo forman son capaces de hablar de aquellas experiencias en las que ellas se sintieron aterrorizadas por lo que se les hizo a ellas o por lo que presenciaron. Un lugar seguro en el que contar la verdad es un espacio de sanación...Un círculo es además, una experiencia de conversación igualitaria que puede trasladarse a otras relaciones. En un círculo se desarrolla la costumbre de ser capaz de expresar ideas, necesidades, sentimientos, y esperanzas, así como de escuchar. En este sentido, entrar en un círculo es una práctica de prestar atención y recibir atención.
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